Unidos para derrotar al enemigo más amenazante

 “Animales Fantásticos: Los Secretos de Dumbledore” (Fantastic Beasts: The Secrets of Dumbledore, 2022) es una película de fantasía que constituye la tercera entrega dentro de la saga de Animales Fantásticos. Dirigida por David Yates como los dos filmes anteriores, el guión corre por parte de J. K. Rowling y Steve Kloves. Este último también fue guionista de los siete largometrajes de Harry Potter. El reparto está compuesto por Eddie Redmayne, Jude Law, Mads Mikkelsen, Callum Turner, Jessica Williams, Dan Fogler, William Nadylam, Ezra Miller, Alison Sudol, Victoria Yeates, Richard Coyle, entre otros. La película ya está disponible para ver en la plataforma de HBO Max.

 

Ambientada varios años después de los eventos que ocurrieron en “Animales Fantásticos: Los Crímenes de Grindelwald” (Fantastic Beasts: The Crimes of Grindelwald, 2018), la historia se enfoca en Albus Dumbledore (Jude Law). Sabiendo que él no puede enfrentar a Grindelwald (Mads Mikkelsen) debido a un pacto mágico que hizo de más joven, su objetivo se centra en reunir a Newt Scamander (Eddie Redmayne) y sus amigos para acabar con este mago oscuro que resulta una amenaza inminente tanto para el mundo mágico como para el mundo humano. En época de elecciones y teniendo en cuenta que Grindelwald puede vislumbrar fragmentos del futuro, Newt y sus amigos tendrán que despistar a través de sus acciones a un enemigo que sigue creyéndose superior a todos.

 

Con un estreno pospuesto debido a la pandemia y con un cambio de actor notable en el rol del villano (hicieron que Johnny Depp renuncie por la acusación de violencia doméstica que presentó su ex pareja Amber Heard), esta tercera entrega dentro del mundo mágico es la que menos creatividad y emoción genera. El problema radica en la cantidad de subtramas que el guión quiere abarcar, con tantos personajes secundarios mal desarrollados que consiguen que al espectador no pueda importarle menos lo que les suceda. Por ejemplo, tenemos a Theseus (Callum Turner), hermano mayor de Newt, personaje que nunca aporta nada significativo para la misión, solo está para formar parte de una escena supuestamente graciosa que no logra su cometido. Por otro lado está Yusuf Kama (William Nadylam), hermano de Leta Lestrange que si su subtrama no estuviera presente de igual manera la película podría entenderse sin problemas.

Otro error se basa en la ausencia de Tina Goldstein (Katherine Waterston): siendo protagonista en las películas pasadas, no se comprende cómo es que acá la dejaron de lado dándole solo tres minutos como máximo de tiempo en pantalla. En cambio metieron a un personaje nuevo, la profesora Lally Hicks (Jessica Williams), que no resulta un aporte vacío pero a la vez el guión no nos permite conocer mucho sobre ella, por lo que solo la apoyamos por ser del bando de los buenos.

Al haber tantos personajes haciendo cosas por separado, la película llega a dar la sensación de que no está yendo para ningún lado. Se llega a tornar larga y con falta de cohesión. Las pocas escenas de acción mágica que hay tampoco logran ser trepidantes ya que como espectador nunca llegamos a sentir ese temor por la vida de los que están luchando.

Como aspecto positivo cabe destacar que los animales que Newt refugia en su maleta siguen siendo adorables. Aparte de los que ya conocemos, aquí se presenta a uno nuevo llamado Qilin, que es como una especie de ciervo que tiene la capacidad de ver dentro del alma de las personas. Con un CGI bien logrado, uno llega a enternecerse por esta criatura, no queriendo que le suceda nada malo. Por otra parte, la ambientación política en Alemania resulta interesante de ver, quizás hubiera estado mejor que la trama profundice más por ese lado.

Con referencias al universo de Harry Potter que incluyen lugares, objetos, música y frases pero que solo sirven como elemento nostálgico, “Animales Fantásticos: Los Secretos de Dumbledore” se queda a medio camino en casi todo lo que propone. Para la próxima entrega esperemos que se nos presente un guión que no se vaya por las ramas.

Puntaje: 5,50

El deseo de volver a ser deseada

 “X” (2022) es una película de terror y slasher dirigida, escrita, producida y editada por Ti West. Filmada en Nueva Zelanda, el reparto incluye a Mia Goth, Brittany Snow, Martin Henderson, Scott Mescudi, Jenna Ortega, Owen Campbell, Stephen Ure, entre otros.

 

Ambientada en 1979, un grupo de seis personas, entre ellos cineastas y actores, se dirige hacia Texas con el objetivo de filmar una película pornográfica en una zona rural en donde vive una pareja de ancianos. Lo que parecía una casa de huéspedes tranquila para ponerse manos a la obra, pronto se volverá un lugar del que parece imposible escapar.

Hay muchos slashers clase B que uno se queda mirando en la tv para reírse por cómo van muriendo los diversos personajes, sin que importe mucho la trama o el guión. En “X” tenemos un caso completamente diferente, ya que desde su fotografía, elección de planos, dirección, sonido y actuaciones la película consigue construir una atmósfera perturbadora en la que desde principio a fin el espectador va a estar interesado en saber qué es lo que va a ocurrir a continuación. La pareja de ancianos es muy aterradora, en especial la mujer llamada Pearl, que dicho sea de paso está interpretada por la mismísima Mia Goth; algo que cuando estás viendo el filme ni siquiera se te cruza por la cabeza. Gran trabajo de caracterización por ese lado.

No solo es una gran sorpresa que Mia Goth interprete dos papeles, también es un detalle que encaja a la perfección con lo que la película busca transmitir. Por un lado tenemos a este grupo de seis personas jóvenes, entre ellos están Maxine (Goth), Bobby-Lynne (Brittany Snow) y Jackson (Scott Mescudi). Ellos irradian juventud, tienen cuerpos envidiables, son activos sexualmente y no tienen ningún tipo de pudor a la hora de mostrar su cuerpo. Por el otro lado están los villanos de esta historia; personas a las que la belleza los fue abandonando con el paso del tiempo, que ya no son lo que eran al punto de que su aspecto físico logra generar asco. Todo gira alrededor del deseo, del contacto con el otro. Pearl no es una villana porque sí, hay un trasfondo detrás que hace que su personaje tome más dimensión, que se entienda por qué actúa de esa manera por más que sea híper reprochable.

Además de eso, desde su guión la película plantea un debate interesante sobre las relaciones de pareja, la diferencia entre el sexo y el amor, las ganas y libertad de descubrirse a uno mismo sin que importe la mirada del otro, la religión y el autoconvencimiento para lograr una respectiva meta. Después de conocer a Martin Henderson como protagonista en la serie de Netflix “Un Lugar Para Soñar” (Virgin River), sorprende muchísimo verlo en un rol tan diferente. Por su parte, la joven Jenna Ortega sigue demostrando que sabe elegir muy bien sus papeles.

Si gustan de los slashers, “X” tiene momentos gore muy bien ejecutados. Pero si aparte de eso buscan una historia que verdaderamente les provoque miedo, que trate tópicos que dejan reflexionando y que no pierda su ritmo en ningún momento, ésta es la opción adecuada. A estar atentos porque una precuela sobre el personaje de Pearl ya se encuentra en postproducción.

Puntaje: 8

La ambición por comerse al mundo como sea

 “Inventando a Anna” (Inventing Anna, 2022) es una miniserie dramática de Netflix creada y producida por Shonda Rhimes (Grey’s Anatomy, Bridgerton). Compuesta por nueve episodios, la trama está inspirada en el artículo de la revista New York titulado “How Anna Delvey Tricked New York's Party People”, de la periodista Jessica Pressler. Protagonizada por Anna Chlumsky y Julia Garner, completan el reparto Arian Moayed, Laverne Cox, Alexis Floyd, Anthony Edwards, Saamer Usmani, Katie Lowes, Anders Holm, entre otros.

 

La historia gira en torno a Anna Sorokin (Julia Garner), una joven de 25 años que, a través de diversos engaños, le hizo creer a la élite neoyorquina que ella era una rica heredera alemana. Con la intención de conseguir préstamos para crear la Fundación Anna Delvey (un club vip artístico), Anna logró estafar a varios Bancos. No solo eso, sino que también se robó un avión, no pagó a los hoteles en donde se alojaba e incluso manipuló a sus amigos más cercanos. Vivian Kent (Anna Chlumsky), redactora en Manhattan Magazine, empezará a visitar a Anna en la prisión de Rikers Island para conocer su historia y escribir un detallado artículo que haga olvidar a los lectores de un marcado error de su pasado.

 

Aficionada por la moda, la belleza y los restaurantes caros, el personaje de Anna Sorokin resulta atrapante desde el minuto uno. Más aún porque está basado en una persona real. Como espectador uno no deja de asombrarse por el altísimo ego y soberbia de Anna. Ella se cree superior a cualquier otra persona, sabe lo que quiere y va a hacer lo que sea para conseguirlo. Con este rol, Julia Garner vuelve a demostrar que es una de las actrices más versátiles de su generación. Si con su Ruth Langmore de la serie Ozark sentimos empatía y consideración, acá pasa todo lo contrario. Anna Delvey miente hasta con su apellido, tapa una mentira con otra mentira, se pone en el lugar de víctima para lograr su cometido y, con su accionar, genera situaciones sumamente incómodas para todo su entorno. A la vez, no deja de ser una joven caprichosa que vive en su propia burbuja pero que es lo suficientemente astuta para generar un aura de respeto e importancia en el exterior, con cualquiera con el que entabla conversación.

 

Por otro lado, otro personaje interesante de esta serie es la redactora Vivian Kent. Decidida por investigar a fondo esta historia, a Vivian le importa más su trabajo que el estar a punto de convertirse en madre. Ella no quiere pensar en el armado de la cuna o la organización de la habitación del bebé, si fuera por ella ni siquiera iría al hospital para hacerse la primera ecografía. Es refrescante ver en la pantalla chica a una mujer tan aficionada por su empleo, que se esfuerza desde el primer momento para convencer a su jefe de que esa es una historia valiosa por contar. Anna Chlumsky, a la que conocemos desde jovencita por ser la protagonista de la película “Mi Primer Beso” (My Girl, 1991), aporta mucho carácter desde sus expresiones faciales, siendo su personaje el que nos llevará a través de su labor periodística de investigación a descubrir la vida de Anna Delvey.

 

Por otro lado, la estructura narrativa de la miniserie se basa en que en cada episodio el foco está puesto en un personaje en particular (novio de Anna, amigos, banquero, abogado, etc.). Esto la vuelve dinámica y entretenida. Sin embargo, en los últimos dos episodios el tono se torna confuso. Mientras que en los primeros siete episodios nos mostraron las formas en las que Anna se las arregló para manipular a un montón de gente, en los capítulos ocho y nueve se intenta defenderla diciéndonos que en Estados Unidos hay delitos y/o crímenes mucho peores, que Anna solo era una chica que buscaba triunfar, que los rumores indican que el padre de Anna era un gángster alcohólico y abusivo, entre otros motivos más. Es súper entendible que tanto su abogado como Vivian Kent hayan formado una conexión con Anna, sin embargo resulta inaceptable que Vivian la defienda, más teniendo en cuenta que ella fue la que pasó meses averiguando todo el mal que Anna cometió.

 

Con algún que otro episodio de relleno sobre el final pero con tantos otros bien logrados, “Inventando a Anna” es una historia fascinante que nos habla sobre la persuasión, la vanidad y el sentido de pertenencia. Anna será recordada como una farsante con aires de grandeza pero también como alguien con un gran sentido de la moda.

 

Puntaje: 7

Esa dicotomía llamada vida

“This Is Us” es una serie dramática creada por Dan Fogelman que inició en 2016 y el próximo martes a la noche llega a su final luego de seis temporadas de dieciocho episodios cada una (salvo la quinta que tuvo dieciséis episodios). El cast es extenso, entre los principales se encuentran Mandy Moore, Milo Ventimiglia, Chrissy Metz, Justin Hartley, Sterling K. Brown, Susan Kelechi Watson, Jon Huertas, Chris Sullivan, Griffin Dunne, Caitlin Thompson, Eris Baker, Faithe Herman y Lyric Ross.

 

La historia gira en torno a la familia Pearson, conformada por la pareja de Rebecca (Mandy Moore) y Jack (Milo Ventimiglia). Ellos tienen trillizos: Kevin (Justin Hartley), Kate (Chrissy Metz) y Randall (Sterling K. Brown). Con el correr de los episodios conoceremos las dificultades, alegrías y conexiones de cada personaje.

Son muy pocas las series que triunfan como lo hizo y sigue haciendo “This Is Us”, una producción que retrata con una humanidad y sensibilidad increíble lo que es la vida misma. Sin sentirse en ningún momento artificial, cada capítulo tiene un nivel de empatía tan asombroso que, sumado a la buena construcción de cada personaje, hace que sea imposible no querer saber más y más sobre los Pearson. Como espectador uno llega a sentirlos muy cercanos, ya que los problemas que atraviesan no están alejados de la realidad. El duelo, la culpa, los asuntos pendientes, el sentirse inferior a los demás y no ver un futuro, las peleas, los celos, el alcoholismo, la adopción y la crianza, entre muchos tópicos más, hacen de "This Is Us" una serie exquisita.

Aunque muchos pueden no querer darle una oportunidad a los Pearson por cómo les resulta sencillo hacer lagrimear al espectador, es esa misma emotividad uno de sus puntos más fuertes. Ésta no es para nada forzada gracias a un equipo de guionistas que sabe lo que hace, sin caer en golpes bajos y logrando muchas escenas memorables que se quedan con uno para siempre. La música tiene tanto poder para acompañar esos sentimientos retratados que, por ejemplo, la canción “To Build A Home” de The Cinematic Orchestra, ni bien comienza sus primeros acordes, ya nos revuelve todo adentro nuestro al pensar en Jack y Rebecca y su épica historia de amor.

Por otro lado, la serie nos va a mostrar a los personajes en distintas etapas de sus vidas. Los veremos siendo súper chiquitos, luego adolescentes, adultos y finalmente con signos físicos de la vejez. En cada fase se utilizan distintos actores, sin embargo esto no genera ninguna dificultad para comprender quién es quién ya que la elección de casting es sumamente acertada. Tanto los tonos de voz y la manera de hablar como la gestualidad, así como el maquillaje a la hora de mostrar a los personajes en edad avanzada, están cuidados hasta el mínimo detalle.

Con unas transiciones y paralelismos dignos de admirar, “This Is Us” tiene todos los componentes para ser la serie favorita y definitiva de muchos. Va a ser súper difícil despedirse de los Pearson la semana que viene, pero de todo lo que nos enseñó esta serie, esto prevalece: si algo te entristece cuando termina, debe haber sido maravilloso cuando estaba sucediendo.

 

Puntaje: 10