miércoles, 28 de marzo de 2018

Gnomos desaparecidos

“Sherlock Gnomes” (2018) es una película animada dirigida por John Stevenson y escrita por Ben Zazove. Funciona como secuela de “Gnomeo y Julieta” (Gnomeo and Juliet, 2011), por lo que retornan las voces originales de Emily Blunt, James McAvoy, Maggie Smith, Ashley Jensen, Michael Caine, Matt Lucas, Ozzy Osbourne y Julie Walters. Además se agregan personajes nuevos a los que les ponen las voces Johnny Depp, Jamie Demetriou, Chiwetel Ejiofor y Mary J. Blige. El productor ejecutivo vuelve a ser Elton John. 


La dueña de los gnomos (esta vez tanto de los azules como los rojos) se muda a Londres. Gnomeo (James McAvoy) y Juliet (Emily Blunt), ya consolidados como pareja, son declarados líderes del nuevo y desordenado jardín. Mientras ellos discuten por tener diferencias entre sí sobre la limpieza del lugar, alguien secuestra a todos sus familiares. Así es como los novios se unirán a Sherlock Gnomes (Johnny Depp) y Watson (Chiwetel Ejiofor) para descubrir al villano, pero en el recorrido sus enojos los harán ir por caminos separados.


En 2011 tuvimos una grata sorpresa con “Gnomeo y Julieta”, película en la que se representaba de una forma divertidísima la tragedia de William Shakespeare. El profundo drama se dejaba de lado para darnos una historia con claras referencias a la obra original que a la vez resultaba fresca por tener personajes interesantes como una Julieta aventurera y con carácter decidido. Después de siete años llega su secuela, un filme totalmente innecesario que no sabe aprovechar a los protagonistas de los que ya nos habíamos encariñado en la primera parte.

Esto ocurre debido a que, luego de una introducción que parecía ir por el buen camino, se decide poner el foco sobre Sherlock Gnomes y Watson (clara alusión a los personajes creados por Arthur Conan Doyle). Éstos no consiguen generar el interés que tenía la pareja de gnomos, y encima nos juega muy en contra que en la mayoría del metraje Gnomeo y Julieta estén cada uno por su lado. El conflicto decae porque se siente súper estirado para lograr una cinta de una hora y media, aparte de que se mete de forma muy forzada un número musical de Irene (Mary J. Blige), en referencia a Irene Adler.

El villano en cuestión, un sujeto amarillo que es el ícono de una marca de pasteles, cansa desde su escena inicial. No tiene carisma y el relato se vuelve predecible a pesar de tener un giro que en primera instancia parecía ser innovador. Además, las gárgolas que actúan como secuaces no logran aportar el entretenimiento buscado.

En cuanto a la animación, continúa siendo correcta tanto en los escenarios como en el diseño de los gnomos. Los pensamientos de Sherlock, mientras intenta resolver las pistas, son en blanco y negro y logran representar muy bien la personalidad del sujeto original (extremadamente inteligente y astuto). Cuando él está en acción también podemos captar su seriedad y autoritarismo, pero en este caso estos aspectos no resultan atractivos.

Aunque “Sherlock Gnomes” deja un buen mensaje sobre valorar al prójimo, ya sea desde el amor o la amistad, la idea de combinar al detective inglés con los gnomos nunca llega a funcionar. A pesar de ello, las peleas del comienzo entre Gnomeo y Julieta mantienen el espíritu de su predecesora. Una lástima que esas escenas sean tan pocas.

Puntaje: 5 

No hay comentarios:

Publicar un comentario